Si he de perecer al abrigo de este manantial,
abrupto, dominante, de fluido reino.
Que no me vuelva loza de mármol,
su frío carácter de primavera postergada,
que deje que el despertar del sol me sonría,
que la luna en su guardia me bese
mientras sus aguas me acarician el descanso...

jueves, 28 de junio de 2018

Soy, eres



Soy, eres  

Soy fantasía, ilusión,
el canto de la alborada
cuando en el amanecer
de tu soledad inquieta,
despierta tu imaginación.  
Nunca la Madame Bovary
insatisfecha, sedienta
de amores por descubrir.
Pues aunque se angosten
mis alas, mi sagacidad
en este infinito cielo,
en este profundo mar,
donde volar, nadar es,
será siempre para mí,
un gran jeroglífico,
nacido en la vertiente
encallada de mis venas.

Eres para mí un sueño
despierto en mi realidad.
Una quimera de amor
que me ama, sin tocarme,
pues tienes el poder secreto
de desnudarme completa,
sin tocar mi cuerpo,
sin aligerarlo de ropa.
Así como se ama lo sutil
lo impoluto,  e intocable.
Más allá del tiempo,
del espacio en la tierra
en la que estamos hoy,
Más allá, donde te amaré
para siempre, mi verdad,
mi presente, mi futuro
en mi alma universal.


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