Emociones
¿Qué piedad trae
este sentimiento?,
Henchido en un
latir exigente
en todas
esas batallas perdidas,
que se mofan
solo con mirarme.
No me sanan,
no me recuperan.
Húmedos huertos de emociones
laten en mi
pecho sus fatigas.
Solo un
suspiro mueve sus raíces,
una caricia
tenue como brisa
sin
conmocionar el caudal salado.
Sediento río
helado sangra
la lluvia del
tiempo olvidado,
con ira en
mis penas tristes.
Heraldos
rebosados en niebla
en mis fluidos
lagrimales.
Se suicidan
desde el acantilado
de mis ojos,
las escapadas perlas,
nacidas en un
enemigo aire.
Heridas de nácar
trasnochado,
al suelo de
mi alma, resbalan.
No me
pregunten que quiero,
nunca más
allá, me busquen
si esa boca
que por mi habla,
su voz a
voluntad no se descubre,
no quiere
desnudarse en mi viento…
Amiga, tenés una capacidad enorme para argumentar en versos lo tremendo, lo desgarrador. Y claro que no es momento para evaluar ni opinar, mucho menos aconsejar, pero lo cierto es que al leerte sigo sientiendo un poco de envidia por esa capacidad tuya. Si, ya sé, cada uno tiene la suya, pero bueno, los humanos somos así, deseamos siempre lo que tiene el otro.
ResponderEliminarSigo intermitente en mi recorrido por el mundo bloguero y por mi sitio también, es que esta quebradura de la pierna me alteró el año, porque aún debo recuperarme. Igual te leo, aunque no esté comentando todo.
No te preguntaré que querés, te diré lo que yo quiero: que estemos ambos bien, vos con lo tuyo, yo con lo mío.
Besos grandes.
Hola Navegante…
EliminarEres muy generoso conmigo…, este poema, es mi necesidad, como digo muchas veces, de colgar fantasmas, esos que a veces se te meten por dentro y te desgarran…, las letras siempre van a ser mis mejores aliadas para reciclar, renovar y respirar aíre limpio cuando hay marejada en tu interior, con turbulencias, amenazantes, no solo con naufragios, por las con sabidas tormentas, e incontrolables lluvias saladas, son en realidad, momentos, este es solo unos de ellos… Ay, amigo, jajajaja, si yo te contara lo que hace de mí, la ladina envidia cochina, jajajajaja, en realidad no la dejo ir nada más que en bicicleta, para que cuando se le pinche la rueda, no pueda ir muy lejos, que ser uno mismo, y es lo que vale frente al mundo, y es tan valido, como lo de cualquiera, porque tú vales “mucho”, ya quisiera la que te escribe, tener parte de tu expresividad cuando hablas de tu vivencias, de cómo lo trasmites, y llegas al lector…
No sabía el percance de tu pierna, sabía que algo te tenía un tanto alejado, algo personal, no sabía qué, espero que estés restablecido o camino de ello, y sobre todo que no te falte una sonrisa, es lo mejor para superar las etapas complicadas, difíciles… También he estado un poco ausente, en mi caso ha sido el majadero tiempo, mis obligaciones personales, me impiden sentarme muy poco, y cuando lo hago, mi necesidad de escribir y leer, me impiden dedicarme a esto, por eso te pido disculpas, por no haberte atendido como te mereces…
Gracias por seguir estando ahí…
Besos
Pensé que te había contado antes sobre mi accidente casero, hace un tiempo me quebré una pierna y eso modifica toda la vida cotidiana.
EliminarSer generoso es bueno, pero no debe ser algo vacío, si lo soy con vos es porque te lo mereces. Otra de las virtudes que posees es lo prolífico, me gustaría a mi tener la capacidad de escribir seguido, como quien dispara una ametralladora de palabras, pero sólo de vez en cuando me visitan las musas. No es en mí voluntario el escribir, me agarra un ataque y chau, ahí voy a teclear.
De nada por estar aquí.
Más besos.