Seguirás aquí
Me desplegaron azahar blanco,
talando mis ramas, mis flores
embalsamaron para el mundo.
Perfume puro de mágica noche,
ahí estabas tú, amor en llamas,
pues al diseñarme, me buscabas.
Me conozco vedad, confundida
disuelta, reflejo del vórtice.
Estás tú separando mis ojos
de los campos de batalla,
delante, y por detrás, imagen
que no quiere que me duerma.
Eres magia sonora, vibrante,
de musas alzadas en tu boca,.
Pigmalión de actual generación,
con precisión mi figura esculpes,
porque estás aquí, conmigo,
será tu voz la que me despierte.
Y para no ser losa de mármol frío
necesito al pedestal sostenerme.
Expertos tus brazos reverberan
el códice ligústico de matiz bíblico
que me guarda y me alimenta,
porque seguirás aquí, conmigo,
para que nunca vuelva a dormirme.
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"Si puedes mirar al rostro a este texto, te agradezco que me digas de qué color son sus pupilas…"