Llueve
Llueve hoy, arrasa el viento,
enfurece, pelea las hojas,
inunda el vacío de las calles,
con el mosto caído, goteado
del tiempo transeúnte.
Es el desarraigo de las parras
por aquellos otoños viejos
con sus diques de papel.
Trasládame tú, ahora,
a la noche de los cuentos,
aquellos leídos tímidamente
cuando los candiles imponían
su tenue luz en el albardón
cerrado con cubas al norte,
donde el vino es solera
al paladar más selecto.
A la luz de la luna, quiéreme,
meciendo sus dentadas ruedas,
los carros venidos del tiempo,
de aquel espacio de muerte
peleada con el rugido de la vida.
Cuando la vida es cruel dolor,
memoria triste…, y valiente,
me canta en tu regazo, una nana.
Dejaste de hacer esas introducciones tan profundas con las que me habías generado el hábito de necesitarlas. Está bien, son decisiones respetables.
ResponderEliminarHoy no voy a hurgar en tus versos porque encuentro en ellos lo espontáneo de la naturaleza misma, por eso me quedo con algunos versos insustituibles.
"Es el desarraigo de las parras por aquellos otoños viejos con sus diques de papel" Ah, quisiera sacarle una foto a estas palabras a ver si se convierten en imágenes, que bellas!
Y trasladarse a la noche de los cuentos leídos con timidez en la compañía de un vino es lo que quiero ya mismo.
Así que brindo por la belleza encerrada en tus palabras y por el grato momento reflejado (tus deseos íntimos son tuyos, yo sólo hago referencia a lo que veo en tu poema como espejo en el que uno, como lector, puede mirarse por unos minutos).
Besos.
Hola Navegante…
EliminarBueno, es una de mis etapas vagas, se podría decir, o más bien, el discurrir de mi pensamiento está más retenido en lo superficial, y nadar en lo profundo lo dejo ahora en descanso, aunque no cantes victoria, soy como el río Guadina, jajajajaja cuando menos lo esperas, hago mis intromisiones hacía la profundidad de la tierra, para luego emerger con todas mis aguas resplandecientes, con mucho que decir y contar…
Gracias por valorar mis versos como lo haces, la reminiscencia da pie a este tipo de inspiraciones, un placer que te halles en ellos…
(Los deseos íntimos son de cada cual, aunque el buen lector, sabe leer entre líneas, y ese derecho le autoriza a ser analítico, e incluso científico de la letra, lo que le lleva visualizar el alma del escritor…, si no fueras así, tu lectura sería irrelevante, y tus comentarios más… comenta, según sientas que tienes que hacerlo, que puntualice o explique algo de lo que me dices, no quiere decir que hayas invadido mi intimidad, o molestado, nunca lo has hecho, y tienes mi respeto por ello…)
Gracias amigo
Besos