He
pensado en decir, y por decir, me he perdido en un río de letras, son como
pájaros, nada extraño, siempre lo pienso así. Un sueño con alas, olvidando su
destino, y yo, cazo mariposas por rutina cuando Morfeo me presta sus dones, y
caigo en sus brazos. Dama soy o cortesana lapidando las horas en quehaceres ruborizados, pues me niego a ver
la vida entorno a mi ombligo, no es sensato subir y bajar de las nubes, a pesar
de la escasez de lluvia en los ojos.
Por
descubrir me quedas tú, y ese sin vivir que toca a mi puerta en momentos traviesos,
ajenos al reloj, en cada vuelta que da la tierra desplazando mis pies, para que
no me atrape el controlador tiempo, el real, jamás fue inventado. Es por eso
que en dormirte conmigo, te sueño como un paraíso inexplorado, quizá hombre,
quizá sentimiento, corazón que me pierde en su movimiento de vida. Nada
extraño, si te cuento entre mis estrellas cuando me miras, y sin saberlo te
rescato de mi centinela cielo.
Feliz
tarde a todos… Gracias… Besos
Como savia secreta resucita.
Es un tiempo lamentable,
escrito hace tantos vanos días,
ahora es vigilia en las noches.
Feliz poblándome distraída
olvida el sentido en la tarde.
Llovizna de sueños nacerán
enamorados de su imagen.
Pronto me guarda la hoja viva,
el amor olvidado de las flores.
Velada la memoria demora
esperanzas en el mismo presente.
Los espejos abiertos, ¿Qué porfían?,
Sus ramas no saben enajenarse,
callan su agonía, pasión amarilla
nacerá primavera, me dice siempre.
Me toca y muero en las sombras.
Perdía, ciega a mis manos cae
la lágrima de emoción demorada,
entra en la tierra debilitándose.
Mar estrellado sus ojos entrega,
vacío de barcos y ríos de peces,
vive cautivado, activa la marea
azul de olas, brácteas moviéndose.
Feliz se muere ociosa. En vela
la acritud inútil, despacio envere
el deseo noctambulo. Ya tocaba
olvidar lo nacido, así, imprudente.
Han sido tantas afónicas flautas,
reparos mínimos hablan insensibles.
Papel arrugado, estética ecofonia
secreta en verso, hoy me despide.
Hay nostalgia aquí, mucha nostalgia. De lo que fue y no es, de lo que no fue, de lo que gustarías que sea, quien sabe. Pero la hay.
ResponderEliminarSeguramente el amor olvidado de las flores no está tan olvidado, el olvido no existe. Seguramente el horizonte ahora vacío mostrará en el momento menos pensado el velamen de un nuevo barco, o el del antiguo. Nadie sabe, así es.
Un abrazo cálido.
Hola Navegante…
EliminarSin duda que si, de un tiempo el cansancio me atrapa, Morfeo y yo somos incompatibles jajajajaja, cuando él me anda buscado yo estoy perdida por los mapas, y cuando yo le busco, está entretenido en otros quehaceres, y ni me escucha, jajajajaja, así que mejor forma para desintoxicar de mi mente todo el lastre que la vida se obstina en acumular en mi interior, que rescatar, aunque sea con dosis de melancolía todo eso sobrante, darle forma, como si fuera un paisaje que tiene que tener su lugar a los ojos del mundo. Después de todo, en el camino perdemos muchas cosas, que nos dejan esa añoranza, de lo irrecuperable, aunque también está esa puerta abierta a lo nuevo, a ese presente, que somos en realidad, y a esa esperanza de futuro… Y no olvides, tú con tu sabiduría de haber vivido, que el amor es el timón de nuestro existir, en todos sus matices, no muere nunca…
Gracias
Besos