Quisiera
hoy tocar un tema, que debiera ser interés de todos, y no solo cuando llenan de
tinta impresa, las páginas negras de la prensa, y de todos los medios de
comunicación, pues suelen ser crónicas de muertes anunciadas en muchos casos, y
no dramatizo, pues aunque no sean tan frecuentes como la violencia de género,
están ahí, a veces a los ojos de todos, y no se hace nada, nadie quiere
implicarse en problemas que parecen propios de la intimidad familiar, se
cierran los ojos, y cada uno va a lo suyo, y luego el horror nos conmociona, cuando
ya no tiene remedio.
Hablo
de la violencia en el entorno familiar, tras la puerta de los hogares, a manos de los hijos, de los padres…, con
problemas de drogadicción, o con algún trastorno mental, como también la
dejadez y abandono de la tercera edad…. Me supongo que la pregunta es, ¿Qué podemos
hacer?, Creo que mucho, una sociedad con estos problemas endémicos, que se
pierden en la lentitud de la burocracia de los juzgados, es el contingente
social el que puede lograr que los organismos gubernamentales, y
administrativos, tomen conciencia de la
prioridad que tienen estos casos, que la rapidez con la que se actué, y medidas
que se tomen, pueden salvar vidas, evitar odiseas de sufrimiento. Cuando una
denuncia llegué, casi siempre amparada con un informe médico, no se tarde de
seis meses a un año en actuar…, no cerremos los ojos, estos casos, al igual que
la violencia de género, hacen de nuestra sociedad, una sociedad enferma, y
problema de todos, hay que movilizarse hacer que los jueces actúen, la justicia
actué en el acto cuando se recibe la denuncia, la violencia nunca se va de
vacaciones, ni celebra fiestas, como no sea la de sumar dolor y muertes…
Gracias
a todos… Feliz Semana… Besos
Antes
del después
Insumisa
desesperanza enciende
lágrimas
a un naufrago herido,
arrancado
del mar de sus sueños,
a
la costa de la cretina realidad.
Profundos
lagos en las pupilas,
son
deseos en los espejos rotos.
Se
sostiene fulgurante la belleza,
aún
bajos los parpados cerrados.
Tan
breves las espaciadas flores
del
apéndice del labio del sonido,
descalzada
de su gracia emotiva,
alcanza
la viva voz en las sienes.
Plumas
de avestruz ignorando
el
tejido de la tenaz nostalgia.
Mejor
no dar la espalda al puente,
al
atajo que duerme la dignidad.
Es
incierta la mano del aliento
camino
de pulir siglos a la esfinge,
centinela
de las archivadas eras,
en
los adolescentes años trucados.
Quiera
el cosmos no dormirme
antes
del después, en sus brazos,
en
la estepa de la constelación
de
eterna mirada de la tierra.
gracias por tus palabras tu musica y tus poemas
ResponderEliminarun abrazo inmenso
Gracias a ti, Recomenzar, por tu gentileza, tu generosidad, al acercarte hasta mi espacio, y apreciar mi sentir...
EliminarBesos