Si he de perecer al abrigo de este manantial,
abrupto, dominante, de fluido reino.
Que no me vuelva loza de mármol,
su frío carácter de primavera postergada,
que deje que el despertar del sol me sonría,
que la luna en su guardia me bese
mientras sus aguas me acarician el descanso...

sábado, 19 de septiembre de 2015

Ya no


Ya no

Ya no, aunque respires el mismo canto,
donde antes,  me ahogué en llanto...

Ya no, no puedo bailar la misma melodía,
donde antes mi memoria se escribía;
engarzada a un zafiro que sostenía mi palpito,
a la brújula que era la vela de tu barco.

Ya no, me regaló la vida una bata de cola,
y ahora mi canto, es el canto de otro cantor,
que pasea mi llano, como un jinete vencedor,
al galope...,
y me hierve la sangre, antes que mi sed se sacie....


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