Si he de perecer al abrigo de este manantial,
abrupto, dominante, de fluido reino.
Que no me vuelva loza de mármol,
su frío carácter de primavera postergada,
que deje que el despertar del sol me sonría,
que la luna en su guardia me bese
mientras sus aguas me acarician el descanso...

lunes, 24 de septiembre de 2012

Derrota



Derrota

Y pensar que lo sabía 
Y mi corazón palpitaba la derrota.
Ahora no es tiempo de segar el trigo,
no tendremos pan que nos alimente,
será prolongado este invierno de hambre.

Y pensar que nuestra flor lloró sus pétalos
alfombrando el suelo para mis pies descalzos.
Camino con miedo hacía nuestra luna
y ya no la veo, tiene los ojos cerrados,
no habrá más nuestra noche estrellada
ni luceros que nos despierten al alba.

Y para qué pensar, si tú y yo fuimos,
Si no somos, y tampoco seremos.
¿Para qué?

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