Si he de perecer al abrigo de este manantial,
abrupto, dominante, de fluido reino.
Que no me vuelva loza de mármol,
su frío carácter de primavera postergada,
que deje que el despertar del sol me sonría,
que la luna en su guardia me bese
mientras sus aguas me acarician el descanso...

miércoles, 15 de agosto de 2012

Como decir te amo


Estar seriamente preocupada implica tomar medidas y lo peor es no saber qué medidas tomar ni contra que. Sencillamente me gustaría saber porque tengo esta imperante necesidad de escribir poemas aún posible amor imposible, que digo imposible, inexistente… ¿O será que me he desenamorado para tener la alegría de enamorarme otra vez y ando en ello, sin saberlo?… Por si las moscas se escapan de las redes del insecticida, me he propuesto hablar muy seriamente con el amor de mi vida y plantearle la cuestión para que no deje el puente de mando demasiado solo, que tengo serías dudas de que, para según qué maniobra, le de igual quien sea el capitán de esta fragata, lo mismo se siente a gusto con algún marinero de la tripulación y está soñando con arribar con él, en alguna isla paradisíaca… Son las cosas de la vida, y es que el amor amigos míos hay que cuidarlo como aún niño consentido, secarle la babilla de vez en cuando, y llenarle de besitos por aquí y por allá, para que crezca cada día feliz, y saludable, que luego pasa lo que pasa y no sirve decirse; ¿En que me habré equivocado yo?…
Besos a todos




Como decir te amo

Es tan difícil decir “te amo”…
Sin remedio zozobran estos brazos
como una dispersa agua de Mayo
en esta tempestad de arrebatos,
anudándose en espesa tela de araña
que sin querer se ven lanzados
a un acantilado de vacíos inertes,
conversos en su padrenuestro…

Quizá despierte la ola en roca
Y suspire un silencio equivoco,
fiel reflejo de un espejo roto,
acuartelado de arena fustigada,
hambrienta de quimeras robadas
y desherede este anhelo del paraíso…

¿Porqué te diluyes dulce ensueño,
como un fantástico unicornio
en ese mítico mar de peces alados?
Y me dejas en esta confusa pausa,
eterna en palabras dormidas…

Deja este palpito abrir su boca,
relajar sus dientes encasquetados,
realidad fulgurante tan segura
expandiendo tu reino de acero
hasta conseguir helar mis huesos
en tu manantial abyecto y bravío
que amasa mi carne en piedra…

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