Si he de perecer al abrigo de este manantial,
abrupto, dominante, de fluido reino.
Que no me vuelva loza de mármol,
su frío carácter de primavera postergada,
que deje que el despertar del sol me sonría,
que la luna en su guardia me bese
mientras sus aguas me acarician el descanso...

lunes, 23 de febrero de 2009

Cobardía

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Cobardía
Te has asomado a la puerta, triste figura que se esconde por las sombras. Aletargado inverna el lagarto y no por ello necesita todo el año.
Puede el frio invierno inundar tu corazón, y plagar de seca lluvia tus ojos, que sorprendidos se deslumbran con solo ver una luz que brilla, que tú ineptitud piensa que agoniza.
Se muere el que vive de espaldas al tiempo, por miedo a que este se asuste y detenido eternice el sufrimiento. Triste semilla, que plagó la fértil tierra, que no puede ni tan siquiera un año de barbecho, acabar con esa triste plaga, que vuelve estéril la esperanza.

Soñaste que tenías alas, como un cóndor volabas. El cielo el paisaje de tus sueños, camino donde desplegar tus alas, desafiar al viento, sin temporal que evitará encontrar ese lugar, que te figurabas tu destino. Pronto tus alas se rompieron, para dejarte frágil en el suelo.
Terrenal eres, ¿Acaso no lo sabes? No te asustes, no significa debilidad el desosiego, ni la inquietud de lo que te falta. Vivir es construir senderos, que no todos te llevan al universo.

Se ensancha el río en su recorrido, si es frágil el terreno, más la dureza lo estrecha, no por ello desiste de hallar las aguas del mar. Tú eres agua que busca su mar. Camina hombre río que no puede la inclemencia del tiempo, con aquellos que no temen ni a la fría sombra de la muerte.

Risa da el que se asusta y escondido entre los pliegues gruesos del miedo, desiste continuar peleando con la adversidad. Es muro derruido, un guerrero derrotado, que parece un bufón que eleva risas de la corte de la vida, que se esconde cuando sube el volumen de una carcajada.

Escondidas están tus manos tras tu regazo, sedientas de la suavidad de esa piel de melocotón ajado, que divisaron tus ojos en otro tiempo. Se arrugan de desesperanza de la calidez que jamás estrecharon. No son aptas, corroídas por el miedo, de tocar las cuerdas del violín, que guarda las notas de la hermosa melodía de vida, que sin atrevimiento se ha convertido en un concierto de un tiempo sin futuro.

4 comentarios:

  1. Juer Antoñi, que apocalipticos son estos dos posts, mira que al leerlos me vinieron a la mente cuadros de Goya. Muy duros los dos, pero en fin, como la vida misma.

    Un besuco grande y feliz semana.

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  2. "Se muere el que vive de espaldas al tiempo"

    ¡Qué bellas palabras! ¡Qué gran verdad!

    Saludos.
    Manolo

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  3. Uno de tus mejores poemas hasta ahora.
    Sin duda.
    Encierra un sentir al que pocos pueden llegar.
    Y del que pocos saben hacer un recorrido por la vida.
    Certero,profundo..pero lleno de vida.
    Besos

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  4. Desde hoy , me desprenderé de mi de mi caparazón
    Desde hoy atenderé más a la razón
    Caminare descalzo, pisando nuevas tierras
    Bailare con todos los locos, que no atiende a normas ni formas
    Escuchare Revolver de los Beatles, mientras me como un helado
    Volare sin alas, por mil noches estrelladas
    Pescare sin sedal

    Toñi, te dejo este pequeña reflexión.
    un abrazo
    Destruiré mi cárcel de hormigón
    Desde hoy..noto que mi reloj biológico, esta marcando mi tiempo

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"Si puedes mirar al rostro a este texto, te agradezco que me digas de qué color son sus pupilas…"