Seré
Sangrara la montaña helada,
allí , cada mañana, el verdor
de mis ojos despertándote.
Será la nieve de mi cuerpo
la que se posara en tu valle
atraída por el ardor de tu boca,
deseosa de ser derretida,
fundida en tu salino sabor
posado por todos mis rincones
por tu atrevida y osada lengua.
No dejes de tejer sueños
en mi insinuante ombligo,
en mi dormido útero de mujer,
o perdurará la nieve fría
más allá de hoy, del ayer
con su pasado en la maleta.
Habita el eco de mi voz
cuando te llama errante,
hasta alcanzar las puertas
de mi gruta, adentrándote.
Es mi misterio, tu misterio
forjado en el índice de los días.
Lenguaje cifrado profundo
en la extensión imprudente,
que una caricia tuya guarda
en mi piel rebelde al tacto.
Imposible limitar este ansia,
borrar tu huella de mi ser,
detener la invasión de emociones
que respira mi alma contigo.
Reverbera en el día la noche
que nos venció con su magia,
y no hagas un sueño inacabado
lleno de nostalgias, este presente
pretencioso, huérfano de motivos.
Dejémonos llevar hasta la cima
del vértigo del deseo encendido.
Agua naciente en tu boca, seré,
en la palpitante necesidad
de tu sexo, reclamándome toda.
Otro relato de intensidad directa, fantástico. Será tu poesía la que derrita el hielo, y no te preocupes, adorarán el ombligo de quien escribe tan profundamente.
ResponderEliminarQue lindas metáforas, forjar el misterio del otro en el índice de los días es tan bello como erótico.
Versos para disfrutar, sin dudas estás pasando por un momento emocional intenso. Felicito.
Y mando beso.
Hola Navegante…
Gracias por tus generosas palabras, me estimulan mucho la apreciación que haces sobre mis palabras, mi humilde sentir…
Sin suda, mi vida atraviesa una etapa emocionalmente, no sé si intensa, diría diferente, en todos los ámbitos que la respiro. Hay etapas que cerramos, y nos vemos abogados a encauzar nuestra vida, por otros derroteros, nos cambia todo, nos guste o no dejar a atrás lo que dejamos, hay que seguir, aceptar, procesar, y sobre todo aprender encontrarte a ti misma en esa nueva etapa, y no es fácil, puede llegar a ser muy duro, por eso escribir, introducirme en la magia de las letras, es para mí un bálsamo, algo que me sana, me recupera, y me alinea con mi norte…
Besos