He tenido un sueño, más bien una
pesadilla, siempre he estado suscrita a ese tipo de sueños raros, que me
asustan como a una niña chica, los fantasmas o las brujas, algunos tan
originales, que se me suelen repetir, tienen ellos esas manías con respecto a mi
persona, no sé qué les habré hecho para que se encariñen así conmigo.
Esta noche pasada, me desperté
sobresaltada a eso de las cinco de la madrugada, con gran dificultad para
respirar, y aún perdida en un mundo irreal, donde el agua era mi compañera, agua,
mucha agua, en un pozo profundo. Entonces recordé el inicio de todo… Estaba
como en las películas del oeste, de vaqueros, en esas cantinas clásicas, en una
habitación frente a una tina de madera llena de agua, con un hombre dentro, y
yo le servía de auxiliar, le frotaba la espalda, y él volvió la cabeza, con una
sonrisa, entonces descubro que es nada más y nada menos, que Manu Tenorio (y no
hagáis trabajar vuestra imaginación, que no es un sueño erótico)…, en ese
momento se me despierta la curiosidad, pues su cuerpo desnudo, yacía
descubierto en la superficie del agua, miro hacía cierta parte de su anatomía,
no tiene sexo, ni femenino, ni masculino. Vuelvo otra vez la mirada a su
rostro, ahora sus ojos eran redondos,
con la retina oblicua como los de un sapo, estira sus manos, me agarra y me
introduce dentro de la tina, caigo, es como gran pozo, que no tiene fondo, el
cual me va absorbiendo. Miro hacia arriba, hay muchas manos, que tratan de decirme que me
agarre a ellas, que me ayudaran a subir, lo intento, no puedo. Recuerdo mi
pánico al agua, cuando no hago pié, para poder dejar mi cabeza fuera de ella, y
así respirar, ahí comprendo que me voy ahogar, supongo que grito, siempre lo
hago con este tipo de sueños, es mi propio grito, o la angustia que siento lo
que me despierta…
Cuando pille a Manu Tenorio, se
va a enterar, para una vez que sueño con él, se me vuelve sapo…Ay que ver!!
¿Recuerdas?
¿Recuerdas?, Andar descalzos,
despedirnos a besos de la
ropa,
hacer reír al sonido callado
de nuestra alcoba cómplice.
Curiosa nos observaba la luna
Incrustando el brillo de sus ojos
entre los barrotes de la
cama.
¿Recuerdas?
Hoy la distancia crea vacios,
celosa estaciona invasora
esta soledad, terca, chirriante,
vestida de oliente ausencia,
doblando esquinas a una casa
llena de frío, sorda de corazón.
Y tú tan de cerca…, tan lejos,
que no te tengo.
¿Recuerdas? Escribir colores
y pintar a las grises sombras
puertas, ventanas al mundo.
Atrevidos, locos desafiantes,
atlas en mano, sin fronteras,
amueblando un incierto sino
amarrado a nuestras mochilas.
¿Recuerdas?
¿Qué ha sido del Nosotros?
Un rostro, borrosa imagen,
tiempo de secos recuerdos,
nos regala instantes, ráfagas.
Mosaico de un ayer despedido
en una estación triste de ida,
de billetes caducados, al volver.
¿Me recuerdas?
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"Si puedes mirar al rostro a este texto, te agradezco que me digas de qué color son sus pupilas…"