Si he de perecer al abrigo de este manantial,
abrupto, dominante, de fluido reino.
Que no me vuelva loza de mármol,
su frío carácter de primavera postergada,
que deje que el despertar del sol me sonría,
que la luna en su guardia me bese
mientras sus aguas me acarician el descanso...

lunes, 27 de julio de 2009

Retiro


A la soledad la he hecho mi amiga Al dolor lo siento como mi mejor maestro Al tiempo lo veo como mi mejor consuelo La fe y la esperanza son mi fuerza para seguir Su amistad es mi mejor fortuna.

Retiro

Soledad compañera sacrílega,
de tantos momentos vacuos.
Deslizas amargura excedida,
por el abyecto engendrado en deshonor.
Al ver estas abatidas lágrimas,
piensas que mi alma tocas, en tu anhelo.

La solución que me dé una requisa,
busco en el polvorín de mis recuerdos.
Donde esta una relegada herida,
que la condolencia nunca restauró.
Es mi retiro, aire para pensar,
ablución que libre mi pensamiento.

Abolir estas cadenas infaustas,
que cierran la egregia senda en el llano,
necesito afianzar en mi voluntad.
Solo así la paz calmara mi canto.
Será esa luz aseada del nuevo día,
quien restituya el alma a mi descanso.

5 comentarios:

  1. Antoñi, resulta difícil restañar heridas. Y hay heridas y heridas. En los momentos difíciles debes recurrir al mismo centro y así y todo es difícil.

    Espero que encuentres esa paz que ansías, tu alma merece felicidad.

    Abrazos, estrella con más fuerza que los astros más brillantes.

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  2. NIÑA
    Abolir estas cadenas infaustas,
    que cierran la egregia senda en el llano,
    necesito afianzar en mi voluntad.

    SIIIIIIIIIIIIIII, éso mismo.!!!!!!!!!!!!!!!
    Gracias por tu poema
    Un abrazo gigante, mi NIÑA

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  3. Las cadenas que nos unen a los pesares se disuelven solamente con la fuerza del alma y del amor.
    Tu poema es un grito en contra de la esclavitud de los sentimientos que duelen y siguen sangrando, es un grito que alguien escuchará...

    Besos, Antoñi.

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  4. Como te entiendo en este poema, las cadenas que no podemos deshacernos de ellas, y que nos causa tanto dolor. Hay que aprender a olvidar lo que hace daño pero sobre todo apartar de nuestro lado lo que nos hace sufrir.
    Un beso.

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  5. Hay veces que esas cadenas que más nos hacen daño son aquellas que alguna vez rompimos y no las olvidamos.
    Saluditos

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"Si puedes mirar al rostro a este texto, te agradezco que me digas de qué color son sus pupilas…"