Hay un dicho popular:
“Le dice la sartén al cazo, _Apártate que me tiznas_..."
Justo eso pasa con muchísimos seres humanos, parecieran no ser conscientes de que en este mundo no debemos ser embajadores de Dios, y menos del diablo, sin mirar nuestro rostro en el espejo cuando nos devuelve la mirada reflejando las consecuencias de nuestros actos… Será porque él que más motivos tiene para no censurar los actos de nadie, tiene la cara más dura para hacer justo lo contrario, habla, lapida, censura, invade, la privacidad y derechos de sus semejantes….
“No des lecciones de moral, precisamente tú que quizá no tengas ninguna”…
Y cuando hablo de moral, no hablo de reglas sociales, ni religiosas amañadas de prejuicios para coartar la libertad del ser humano, hablo de la dignidad de los actos a través de los cuales nos convertimos en personas respetables…
Gracias
Justo eso pasa con muchísimos seres humanos, parecieran no ser conscientes de que en este mundo no debemos ser embajadores de Dios, y menos del diablo, sin mirar nuestro rostro en el espejo cuando nos devuelve la mirada reflejando las consecuencias de nuestros actos… Será porque él que más motivos tiene para no censurar los actos de nadie, tiene la cara más dura para hacer justo lo contrario, habla, lapida, censura, invade, la privacidad y derechos de sus semejantes….
“No des lecciones de moral, precisamente tú que quizá no tengas ninguna”…
Y cuando hablo de moral, no hablo de reglas sociales, ni religiosas amañadas de prejuicios para coartar la libertad del ser humano, hablo de la dignidad de los actos a través de los cuales nos convertimos en personas respetables…
Gracias
La voz levita
Insólita palabra sin rostro
aún cuando la voz se desnuda
urdiendo, disuadiendo a hipérboles.
Cuantas veces el agua fue metáfora,
manos trémulas buscando la luna en la lágrima
cada madrugada insomne.
Hoy saldré, como tantas veces
a buscarte a ti, dibujándote
incluso acariciando tu piel de llanto.
Tomaré tu cuerpo de la nada
Pues eres tú quien me habla de todo y de nadie.
Sé que al final será tu beso
viento silencioso que el vacío llene.
Vacío del papel hambriento
despertando del silencio blanco.
Me ahoga el sinsentido espada,
habla del morir en las playas
donde descansan los alfabetos muertos.
Quizá podría comprar su mar
si duermo con los ojos abiertos
amedrentando sus olas a paradojas.
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"Si puedes mirar al rostro a este texto, te agradezco que me digas de qué color son sus pupilas…"