Nací para encontrarte
Nací buscándote
al igual que la luna al sol.
Como sol me duermes
despertando el amanecer.
Y te vas cerrando tus parpados
apenas me viste la penumbra
en el atardecer.
Nací con tu voz en mi oído
sin saber que no eras aire,
ni canto de golondrina
volviendo en primavera.
Naci con la memoria de tu piel
sobre mi piel,
con un destino, encontrarte.
Y en ese destino decía;
"debes dejarle marchar".
Somos dos caminos
con huellas diferentes,
se tocan en un cruce,
suave con prisa se besan
y vuelven rápido sus ojos
hacía distinto norte.
Precioso poema, quién no ha tenido una amor o una pasión de un momento? Fue ir leyendo cada frase y reconocerme en él...
ResponderEliminarMis pupilas son de color otoño
ResponderEliminarBellísimo poema, de profunda espiritual.Hermoso !!!
ResponderEliminarMis pupilas verdes grisáceas han recorrido y navegado entre entre el océano no de transparencia de tu alma
ResponderEliminarMe sentí identificada con mi amor en este poema profundas las palabras llenas de sentimiento
ResponderEliminarLa poesía misteriosamente mueve todos muestras entrañas, y es que allí fueron depositados nuestros más profundos sentimiento,que no pudo destruir ningún viento
ResponderEliminarMí primer amor lo viví un hermoso otoño...fui muy feliz!!!
ResponderEliminar