Hace un par de años, creo, no estoy muy segura, me
recomendaron la lectura de una novela, que en es en realidad una trilogía,
"Cincuenta Sombras de Grey" ..., Compré los tres libros muy decidida,
y me ocurrió como con El código Da Vinci, que ante la gran polvareda que
despierta y ese gran movimiento en masa hacia su lectura, a mi me hace sentir,
"cazada por el rebaño", como si entre la letra impresa se ocultara
algún tipo de droga, y los dejé muy vistos a mi mirada para que despertaran mi
tentación y amortiguar así la inversión que ha supuesto su compra..., pues
no!!, Me temo que soy muy cabezota en mis convicciones, así que ha llegado la
película, y tampoco ha despertado mi curiosidad, sin embargo mis hijos sin han
ido a verla, y ese hecho si me ha movido a coger el libro e iniciar su lectura,
pues mi hija solo tiene dieciséis años, y me ha inquietado como pueda procesar
el argumento... Muy lista y madura para su edad, es mi pequeña.., en estos días
que voy descubriendo la trama de la susodicha novela y las sombras del
sofisticado personaje, me deja de piedra los razonamientos que me hace mi
princesa, no sé si sentirme orgullosa o asustada. Es cierto que es una gran
lectora, desde muy pequeñita, y eso ayuda a descubrir en lo que lees más allá
de lo impreso, procesa la novela desde el aspecto psicológico, y no desde el
sexual erótico por el cual se ha hecho famosa...
Llegado a este punto, no pretendo recomendar que dejéis o no a vuestros hijos menores, leer o ver la película, eso es personal, ademas de difícil de evitar. Sin embargo si haría un inciso; " casi siempre, lo que mas destaca de las cosas no es lo importante, lo importante está, como en las plantas, en lo profundo que hace aflorar al tallo hacía la superficie de la tierra buscando el sol; en la raíz, que da las características y personalidad a cada planta". Luego, si son capaces de cifrar esas cincuenta sombras de Grey a parte de su potencial erótico, pienso que no hay problema...
Llegado a este punto, no pretendo recomendar que dejéis o no a vuestros hijos menores, leer o ver la película, eso es personal, ademas de difícil de evitar. Sin embargo si haría un inciso; " casi siempre, lo que mas destaca de las cosas no es lo importante, lo importante está, como en las plantas, en lo profundo que hace aflorar al tallo hacía la superficie de la tierra buscando el sol; en la raíz, que da las características y personalidad a cada planta". Luego, si son capaces de cifrar esas cincuenta sombras de Grey a parte de su potencial erótico, pienso que no hay problema...
Oh, se me olvidaba, no se dejen adiestrar, es mejor ser
libres "siempre", aunque en el amor, el sexo y otros menesteres en su
poder de sumisión tiene un algo adictivo que lleva a confundir ciertos
términos... a la luz de esas sombras escribí este poema, que pudo haber sido
peor de lo que es, jajajaja
Gracias a todos y mil besos, que podrán adiestrar como
gusten...
Se me escapa tu nombre
Se me escapa un nombre de mi boca
suena a llanto de saxofón y a bambalina
en cada saturada silaba, tu nombre
ahogado en mi rígido paladar...
No le haré memoria en los días que mueren
y trato sin recurso apagar su llama
en este torrente que desborda mi corazón...
Cortante como guadaña el silencio espeso…,
cae, cae agónico de un pedestal incomodo,
este amor que se instaura en mí sin permiso...
Se me escapa sin querer tu nombre
mi amor, de esta insubordinada boca,
corre al tropel la sangre en mi venas
ante este fuego que me abrasa
sin cordura todos mis hemisferios…,
norte, sur, este, oeste...,
nada escapa a tu osada brújula.
Navegas mis entrañas, pirata,
ladrón en todos mis sentidos...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
"Si puedes mirar al rostro a este texto, te agradezco que me digas de qué color son sus pupilas…"