Si he de perecer al abrigo de este manantial,
abrupto, dominante, de fluido reino.
Que no me vuelva loza de mármol,
su frío carácter de primavera postergada,
que deje que el despertar del sol me sonría,
que la luna en su guardia me bese
mientras sus aguas me acarician el descanso...

sábado, 14 de noviembre de 2015

Hace tiempo

Hoy París somos todos... 

No seré yo la que levante mi mano intentando impartir justicia para que paguen justos por pecadores, como no pondré etiquetas a un grupo de seres humanos porque parte de los que usan su nombre lleven la barbarie y el horror por el mundo....
Hoy el mundo llora, y lo triste es que lo haga porque un grupo terrorista de seres humanos que se consideran embajadores en la tierra, de un dios justiciero, se adjudiquen el derecho de matar, destruir a parte del verdadero Dios, el Dios de todas las religiones de todo lo que tiene vida y que siempre va significar, eso, "Vida", jamás muerte, destrucción, horror, luto... Hoy ese Dios, el que el ser humano jamás será capaz de inventar, de crear leyes bajo su nombre, para poder hacer súbditos que sean usados por el poder de otros hombres, sirviendo a los intereses que solo benefician a unos pocos, ese Dios llora mucho más bajo un cielo de lágrimas conmocionadas, de un suspenso sol desorientado...


Hace tiempo

Hace tiempo, mucho tiempo
antes de que el tiempo existiera
y el ser humano caminara erguido
Dios era todo, y  por todos
reconduciendo la libertad de la vida.
Ahora con tantos dioses de texto
con sus versículos y sus leyes
los hombres se levantan en armas
y en honor a su falsos nombres
ciegan la libertad y la vida.

Acaso no somos células de Dios
brazos, ojos, piernas, corazón,
cada gota de vida que mana al mundo.
¿Qué es Dios si no?, Es el que llora
por toda su sangre derramada
bajo todas las lunas de este planeta
exhibiendo su nombre sin su permiso.

Hace tiempo, mucho tiempo
antes de ser el dios, inventado,
siendo aún Dios, Dios de la vida
sin ser escrito, ni proscrito.
Era Dios del mundo, era Dios
Vinieron los dioses de leyenda
y Dios desertó avergonzado.

Cuando el ser humano acepte
la diferencia en igualdad,
silenciando las armas con el olvido.
Cuando el falso dios sea derrotado
por lo justo y la verdad.
En ese tiempo Dios dejara de llorar.

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