Calor
Parece que el tiempo se durmiera
Y el pendenciero reloj no para…,
Los árboles están somnolientos
cargados de prematuro calor
arrojando sombras verde oscuras
por una añorada brisa que no llega
a acariciar el rostro a un Mayo manso,
nada, sin nada en la tormenta
de noche cálida con olor a verano.
Paisaje de suave tela de gasa púrpura,
inacabada primavera de verbos famélicos.
Queda atrás el helado viento de Marzo
que llevaba copos de aguanieve en su aliento.
Quizá mi necesidad de agua se extravía,
inquieta, por beber en los años olvidados
cuando la lluvia reía con los campos…
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"Si puedes mirar al rostro a este texto, te agradezco que me digas de qué color son sus pupilas…"